El maestro luthier cambia de
paisaje...
Alejandro Arzola Parariá,
gran maestro de la luteria venezolana,
creó bandolas, arpas, bandolines, mandolines de media lira, guitarras, cuatros,
que vibraron en las manos y en las almas de grandes maestros de la música
tradicional venezolana como Juan Esteban García, insigne músico guariqueño,
maestro bandolista.
Alejandro Arzola Parariá. Foto: Manuel Abrizo. Fuente: www.cuentaelabuelo.blogspot.com |
San José de Guaribe, Guárico. Este domingo, 11 de noviembre de 2012, se
vuelve eterna el alma de Alejandro Arzola Parariá, amado luthier nacido en Rio Grande de Cúpira, estado Miranda, quien se
enamoró de su oficio en el taller de Ángel Matute en Río Chico. Hizo su
primera bandola a los 12 años. Luego de establecerse en San José de Guaribe,
estado Guárico, se dedicó a crear instrumentos musicales que luego aprendió a
tocar. El admirado maestro dejó su legado en cientos de alumnos, vibró con sus instrumentos
haciendo la música del llano venezolano, cantó fulías a la Cruz de Mayo, en San
José de Guaribe y poblaciones aledañas, y nutrió las raíces y la identidad del
pueblo venezolano.
De sus manos nacieron miles de instrumentos musicales. Por casi seis
décadas, el maestro Alejandro Arzola Parariá creó bandolas, arpas, bandolines,
mandolines de media lira, guitarras, cuatros, que vibraron en las manos y en
las almas de grandes maestros de la música tradicional venezolana como Juan
Esteban García, reconocido creador, maestro e innovador de la técnica de
ejecución de la bandola cordillerana o central.
La cantautora Amaranta Pérez escribió sobre el maestro Arzola Parariá:
“Despedida a Parariá
Hoy una lágrima Guaribe
Bandolistas, arpistas, maraqueros, poetas, artesanos. ¡Arriba Alpargata, cuatro, maracas!
Que hoy se eleve una elegía, un homenaje desde toda expresión de nuestra tradición para
Alejandro Arzola Parariá. Porque hoy se despide de su estado físico dejándonos una obra de sagrado valor para las venezolanas y venezolanos. Arzola Parariá logró plasmar para siempre su amor infinito por nosotros y nuestra tierra venezolana desde su canto, sus composiciones y su ejecución magistral en la bandola. Este insigne maestro joropero se constituyó como uno de los más importantes artesanos (lutier), y nos ha dejado en instrumentos, una obra extensa y de invaluable calidad artística, por su sonoridad y belleza tan evocativa del pueblo guaribero.
Bandolistas, arpistas, maraqueros, poetas, artesanos. ¡Arriba Alpargata, cuatro, maracas!
Que hoy se eleve una elegía, un homenaje desde toda expresión de nuestra tradición para
Alejandro Arzola Parariá. Porque hoy se despide de su estado físico dejándonos una obra de sagrado valor para las venezolanas y venezolanos. Arzola Parariá logró plasmar para siempre su amor infinito por nosotros y nuestra tierra venezolana desde su canto, sus composiciones y su ejecución magistral en la bandola. Este insigne maestro joropero se constituyó como uno de los más importantes artesanos (lutier), y nos ha dejado en instrumentos, una obra extensa y de invaluable calidad artística, por su sonoridad y belleza tan evocativa del pueblo guaribero.
Expresamos nuestra solidaridad y acompañamos a sus familiares y amigos por tan sentida pérdida.”
Radio Nacional de Venezuela, se une a las palabras de Amaranta para despedir
al maestro Arzola Parariá en su partida a la eternidad. El compromiso de las
mujeres y hombres, voces que envían mensajes a través de la señal de la radio
del Estado – Pueblo venezolano, continuará expresándose en la defensa de la verdad
de nuestras tradiciones, la música y la poesía que guardan la esencia de los
venezolanos.
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